La gran comedia fortunas de Andrómeda y Perseo

3.00

ISBN: 9788499537252 Categoría: Etiquetas: ,

ISBN rústica: 9788498164268


La gran comedia fortunas de Andrómeda y Perseo. Pedro Calderón de la Barca

Jornada primera

(Descúbrese el teatro de las caserías nevadas, dicen dentro y salen después Bato, Gilote, Ergasto y Riselo, villanos, [y tras ellos, sale Perseo].)

Riselo: ¡Huye, Gilote!

Gilote: ¡Huye, Bato!

Bato: ¡Huye, Ergasto!

Ergasto: ¡Huye, Riselo!

Perseo: ¡Vive Júpiter, villanos,
que habéis morir!

(Sale Riselo.)

Riselo: Los fresnos
me amparen.

(Sale Ergasto.)

Ergasto: A mí los chopos.

(Sale Gilote.)

Gilote; A mí los álamos negros.

(Sale Bato.)

Bato: A mí las cepas y parras,
los pampanos y sarmientos,
árboles santos, pues siempre
por ermitas los encuentro.

Gilote: El diabro mos trujo acá
este mochacho soberbio
para que mos mande a todos.

Ergasto: Cuando los montes cubiertos
de nieve, tiene ateridos
la ancianidad del invierno,
es quando más solicita
llevarmos por juerza a ellos,
para que a sus caserías
le sirvamos los ogeos.

Riselo: Un lobo, que diz que anda
en la sierra, es el intento
con que hoy pretende llevarnos.

Ergasto: ¿Lobo?

Gilote: Sí.

Bato: No es lo peor eso.

Riselo: ¿Qué es?

Bato: Que el lobo es un perdido,
jugador, y mojeriego;
que a ser un lobo apricado
de estos que llaman caseros,
el primero huera yo
que huera donde él primero
se metiera en mis entrañas

Gilote: Yo nieve ni lobo temo,
sino es que tan atrevido,
tan osado y tan resuelto
que un día me quixo entrar
en eso lóbrego seno,
funesta gruta sagrada
a la deidad de Morfeo,
donde siempre andan visiones.

Ergasto: Nosotros mismos tenemos
la culpa de que mos trate
un rapaz con tanto imperio;
que, si hubiera entre nosotros,
aunque pesara a Cardenio
que por nieto le ha criado,
uno que, osado y resuelto,
le diera a entender quién es,
a fe que tuviera menos
soberbia.

Gilote Muchos hubiera;
que si les dijeran eso,
quizá abajaran los bríos.

Bato Decidme, para saberlo,
¿es cierto que si supiera
quién es, desde aquel momento
no diera los mojicones
que suele dar?

Fragmento de la obra