El escondido y la tapada

3.00

ISBN: 9788498972252 Categoría: Etiquetas: ,

ISBN rústica: 9788498164107


En El escondido y la tapada, de Pedro Calderón de la Barca, don César ama a Lisarda pero rechazado por ésta galantea con Celia. Cierto día tras ver a Lisarda pasear con un hombre sale a su encuentro y lo mata y resulta que éste es el hermano de Celia. Abrumado, huye de Madrid con su criado, Mosquito.
Luego una carta de Celia lo hace volver. Ella le ofrece su casa para esconderse. Al mismo tiempo regresa de la guerra don Félix, hermano de Celia, alertado por un amigo de que el honor de su hermana puede estar en entredicho.
Por su parte, don Juan, prometido de Lisarda, pide ayuda a don Félix para vengar la muerte del hermano de ésta. Don Félix acepta pero se confunde de hombre, tiene que huir de la justicia y se lleva a Celia consigo a otra casa para esconderse. De esta manera César y Mosquito quedan encerrados en una habitación secreta de la casa.
La casa es alquilada ese día por el padre de Lisarda, que lleva a su hija y al prometido a vivir en ella. Al intentar escapar César, allí escondido, y al acudir Celia, tapada, en su ayuda provocan una serie de enredos.
Ya el lector entiende que El escondido y la tapada es un drama de enredos, con una trama trepidante.

Jornada primera

(Salen haciendo algún ruido don César y Mosquito, vestidos de camino, con botas y espuelas.)

César: Pues no podemos entrar
en Madrid, hasta que sea
de noche ya, ata las mulas
a esos troncos; y sobre esta
tejida alfombra de flores
que bordó la primavera,
entre estos estanques donde
la Casa del Campo ostenta
tanta variedad podemos
esperar a que anochezca.

Mosquito: Ya están las mulas atadas;
y aun fuera más justo que ellas
nos ataran a nosotros.

César: ¿Por qué?

Mosquito: Porque son más cuerdas.

César: Luego ¿los dos somos locos?

Mosquito: Concedo la consecuencia;
mas con una distinción.

César: ¿Cuál?

Mosquito: Tú por naturaleza,
y yo por concomitancia;
que es por lo que se me pega
de andar contigo.

César: ¿Aquí, pues,
qué hay que locura sea?

Mosquito: ¡Cuerpo de Cristo conmigo!
Habrá tres meses apenas
que salimos de Madrid,
por haber dejado en ella
muerto a un noble caballero,
que era hermano, por más señas,
de una de aquellas dos damas
que a un mismo tiempo festejas,
y por celos de la otra;
que, como autor de comedias,
tienes en tu compañía
segunda dama y primera.

Fragmento de la obra