Centón Epistolario III
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Domingo del Monte fue un escritor y crítico literario cubano. Su obra Centón epistolario (1823-1857), recoge la correspondencia recibida a lo largo de su vida y ordenada por él mismo. Este material ofrece esenciales datos sobre la historia política y literaria cubana de los años 1822-1843 y constituye una de las obras más excepcionales, originales y útiles de la historia intelectual cubana. El Centón fue editado en siete tomos entre 1923 y 1957 por la Academia de la Historia de Cuba. Reúne cerca de 2.000 cartas de personalidades de diversas partes del mundo. Fue publicado por Domingo Figarola-Caneda (publicó los tres primeros tomos), con el nombre de Centón Epistolario de Domingo del Monte.
Domingo del Monte fue parte del grupo de creadores de la Academia Literaria Cubana y director de la Revista Bimestre de la Isla de Cuba (1831-1843), en donde publicó una pequeña parte de su amplia producción literaria. También fue editor de La Moda o Recreo semanal del bello sexo en el 1829 y El puntero literario, en el 1830, y miembro de la Sociedad Económica de Amigos del País, siendo Secretario de la Sección de Literatura en el 1830.
Sr. D. Domingo del Monte
Suplicada a d. Ant.º Gutierrez
Habana
Matanzas y enero 7 de 1841Mi queridísimo Del Monte.
Remito a V. un ejemplar de las poesias de Miguel Tolon, titulado: Los Preludios. Aunque no consta mas que de doce composiciones, estas estan generalmente escritas con versificacion tan armoniosa y estilo tan animado, que no dudo que agraden á V. como á todos los que las han leido. Creo que otras veces he dicho á V. cuan fundadas esperanzas en pro de la poesía cubana he concebido al leer las producciones de este amable y juicioso joven. Todavía no tiene, ni es posible que tenga, la instruccion suficiente para caracterizarle de gran escritor, pero hay chispa en él, hay sano gusto; y estos requisitos, ayudados con la aplicacion y la constancia, pueden conducirle algun día á la perfeccion que tantos anhelan. Tenga V. la bondad de leer este corto volumen, y anunciarme qué idea ha formado V. de los versos y del que los compuso. Este juicio crítico se lo leeré a él mismo, y espero que los consejos de V. contribuyan mas poderosamente que los mios á encaminarle por la buena senda, estorbando que se descarrie.
He sabido que se ha mudado V. de la calle de la Habana y que vive por el Cristo: por eso y porque juzgo q.e esté V. muy ocupado con el ferro-carril no estraño su largo silencio.
Pongame V. a los p.s (q.b.) de Rosita, con mil cariños á los chicos y disponga V. del corazon de su spre. inv.le am.o.J. Jacinto Milanes
¡Ojalá le hayan agradado á V. mis cuadros dramáticos!