Aula de cortesanos
€3.00 – €14.59
ISBN rústica tipográfica: 9788498168037
Cristóbal de Castillejo es uno de los máximos exponentes de la sátira antipalaciega con dos de sus composiciones:
- las Coplas a la Cortesía
- y su diálogo más importante y broche final de su producción, el Aula de cortesanos.
Castillejo utiliza un mismo código satírico para referir la personificación de una corte descalabrada, ya sea la castellana o la portuguesa. Así la estructura dialogada del Aula de cortesanos se presta considerablemente a la dramatización y quizás fuese una obra representada ante un público reservado cortesano, por lo que se acerca a la virtuosidad dramática de la literatura anticortesana muy popular durante el Siglo de Oro. Una literatura que retrata la corte como un lugar de miseria, sufrimiento y vicio.
En Aula de cortesanos Cristóbal de Castillejo muestra un diálogo entre dos personajes:
- Lucrecio, un joven ávido de dinero, lucro y ganancia que cree poder satisfacer sus ambiciones en la vida cortesana;
- y Prudencio, un hombre sabio y desengañado de esa vida.
Capítulo I
Lucrecio: No sé qué camino halle
Fragmento de la obra
para tener de comer,
y conviéneme buscalle,
por que al fin es menester,
pese a tal; 5
que veo que cada cual
pone todo su cuidado
por ser rico y, principal,
y no vivir afrontado
con pobreza; 10
lo cual, aunque no es vileza,
según el dicho vulgar,
eslo en fin si por pereza
deja el hombre de llegar
a ser algo. 15
Yo, pobre gentil hidalgo,
de bienes desguarnecido,
si por mí mismo no valgo,
siempre viviré corrido
sin reposo; 20
y al mancebo virtuoso,
obligado a más valer,
para vivir deseoso,
más le valiera no ser
entre gentes. 25
Pues confiar de parientes
el que no tiene de suyo,
más cerca tiene sus dientes,
y es, gran cosa, ave de tuyo.
No hay hermano 30
ni pariente tan cercano,
ni amigo tan de verdad,
como el dinero en la mano
en cualquier necesidad.
Cualquier cosa, 35
fácil o dificultosa,
se alcanza con el dinero,
y se nos muestra graciosa
donde él va por mensajero
del deseo. 40